Columna redactada por Pablo De Benedictis, Co- Fundador de GoodEnergy
Invertir en energía solar es convertirse en dueño y generador de nuestra propia electricidad. Los sistemas de energía solar son la única alternativa sustentable a los servicios que se adapta a las necesidades de los hogares. El sol es una fuente ilimitada y siempre disponible para aprovechar. Los avances tecnológicos han transformado la energía solar en una de las más eficientes y económicas del sector de las renovables. Así pues, esta fuente inagotable de energía además de contribuir a la sostenibilidad del planeta atrae la inversión, genera empleo y aumenta la competitividad de las empresas.
En un momento en el que la responsabilidad hacia nuestro planeta y el medioambiente es un objetivo prioritario, conviene saber los diferentes tipos de energía solar, su funcionamiento y cómo extender su uso como fuente de generación eléctrica.
Hoy en día con un termotanque solar se puede tener agua caliente todo el año gracias a la radiación solar. Los paneles solares, permiten congelar el valor de la energía a 30 años, además seguir conectado a internet y conservar la heladera independientemente de los cortes de luz, y tener un ahorro energético todos los meses. Y como si fuera poco, se puede climatizar la piscina sin depender de una caldera a gas que consume muchísimo.
La energía solar permite independizarse de los servicios, representa la democratización de la energía y el usuario tendrá acceso a una energía renovable, limpia y ecológica. Ahorrar cada mes en la factura de electricidad con energía solar limpia y renovable es ahorrar de forma sostenible. Es tomar medidas para reducir los gastos a largo plazo a la vez que se contribuye a un medio ambiente más limpio y saludable.
La democratización de la energía, especialmente a través de tecnologías como la energía solar fotovoltaica, es fundamental para reducir nuestra huella ambiental y mitigar los efectos del cambio climático. Al aprovechar una fuente de energía limpia y renovable como el sol podemos disminuir la emisión de gases de efecto invernadero y preservar los recursos naturales para las generaciones futuras.
Una vez que el sistema está instalado, la energía generada por los paneles solares puede utilizarse para alimentar tus electrodomésticos y dispositivos eléctricos, lo que reduce la necesidad de gastar energía de la red eléctrica convencional. Con los sistemas de paneles solares ante un corte, sigue funcionando la heladera, la iluminación, internet y podemos seguir trabajando con normalidad, ahorrando energía y reduciendo el números de la factura de luz mensual.