El vicegobernador de la provincia argentina del Chubut, Gustavo Menna, participó del foro “Energía Chubut 2050” y reclamó una ley nacional adaptada al desarrollo del hidrógeno verde. Señaló que la provincia tiene recursos de clase mundial, pero necesita un marco normativo que garantice seguridad jurídica, exenciones e incentivos a largo plazo.
Chubut quiere ser protagonista en el futuro energético, no solo del país sino del mundo. Por eso, en el foro “Energía Chubut 2050”, el vicegobernador Gustavo Menna pidió avanzar con urgencia en un marco legal que convierta al hidrógeno verde en una oportunidad real de desarrollo. “Tenemos las condiciones naturales. Lo que falta es previsibilidad: nadie va a invertir millones sin saber si podrá repatriar utilidades o si las reglas cambiarán a mitad de camino”, advirtió.
Durante el panel sobre hidrógeno verde —uno de los ejes del evento que reunió a funcionarios, empresarios y referentes del sector energético— Menna trazó un escenario posible, casi cinematográfico: “Un campo con cigüeñas petroleras trabajando, dos parques eólicos de 35 megas, una planta desalinizadora, el electrolizador separando hidrógeno y oxígeno del agua, una turbina que alimenta el mismo yacimiento. Eso existe. La transición ya comenzó”, dijo. Pero rápidamente advirtió que ese escenario todavía no tiene garantías para escalar: “Nos falta una ley adaptada a esta nueva matriz productiva”.
Argentina ya tuvo una ley de hidrógeno, sancionada en 2006. Pero según Menna, estaba pensada para otro tiempo. “Nació junto a la ley de biocombustibles, pero nunca tuvo impulso real. Nosotros, desde Chubut, en 2018 impulsamos una nueva iniciativa con foco en el hidrógeno verde, que hoy retoman Ana Clara Romero, la senadora Terenzi y el diputado Maquieira. Lo importante ahora es que no nos quedemos esperando una ley ideal, sino que avancemos con una ley posible”, enfatizó.
El proyecto que impulsa la provincia —y que está en discusión en el Congreso— se apoya en tres pilares: estabilidad fiscal, beneficios tributarios e incentivos a la demanda. Menna sostuvo que el RIGI, el régimen de incentivos que propone el Gobierno nacional, “no alcanza para el hidrógeno verde” porque plantea una ventana de acceso demasiado corta: “Dos años más uno no son realistas para proyectos que necesitan madurar tecnología, cerrar contratos de exportación, cumplir procesos ambientales. Se necesita un esquema más robusto y con plazos acordes”.
También explicó que el hidrógeno verde permite aprovechar la energía renovable que hoy se pierde por falta de infraestructura de transporte eléctrico: “Chubut tiene el mayor potencial eólico del país. Manantiales Behr, por ejemplo, tuvo un factor de ocupación del 71,6% en mayo de 2023. Esa energía no se puede inyectar al SADI porque no hay líneas. Pero sí se puede transformar en hidrógeno y exportarla”.
Política de Estado
Menna volvió sobre una idea que sobrevoló el evento: el desarrollo energético requiere consensos amplios y políticas sostenidas en el tiempo. Como ejemplo, citó la Ley 27.191 de energías renovables: “Fue impulsada por el senador chubutense Marcelo Guinle durante un gobierno peronista, pero se puso en marcha durante el gobierno de Macri. Eso fue una política de Estado. Así pasamos de un 0,5% de renovables en la matriz energética a más del 20%, con Chubut liderando en potencia instalada”.
La misma lógica, dijo, debe aplicarse al hidrógeno. “Esto no es un tema partidario. Es una apuesta de país, y Chubut puede ser protagonista. Pero hay que dar el paso. En el foro que hicimos en Comodoro hace un año con embajadores europeos, se habló de una demanda concreta y de proyectos que podrían totalizar hasta 200 gigas de capacidad instalada. Argentina tiene 45 gigas hoy. Claro que no todo eso es viable, pero muestra la escala de lo que podríamos lograr”, planteó.
Para cerrar, Menna destacó que hoy hay una buena coordinación entre Nación, provincia y municipios, incluso con diferencias políticas. “Hace poco firmamos un acuerdo de competitividad para la industria hidrocarburífera con todos los actores de la cuenca. Esa misma madurez se necesita ahora. Porque si no generamos las condiciones, otros países van a ocupar ese lugar. Y nosotros nos vamos a quedar, otra vez, mirando pasar el tren del desarrollo”.
*Información gentileza de ADNSUR